También conocido como lavado o de árido visto, es un pavimento decorativo. Por sus características de acabado rugoso, antideslizante y con alta resistencia al desgaste está indicado para zonas peatonales, viales de tráfico rodado ligero, rampas de garaje, alrededores de piscinas, parques, zonas de recreo y de tránsito exterior etc..

Esta técnica consiste en dar un tratamiento de lavado a la capa de rodadura de modo que quede a la vista el árido que conforma el hormigón.
Ofrece la posibilidad de distintos acabado según el color, forma y tamaño de la piedra elegida; canto rodado, machaqueo, gravilla, colores calizos, ofíticos, etc.. El más utilizado es el conformado por áridos de canto rodado de hasta 10mm, ya que consigue una buena estética y es menos abrasivo que los realizados con áridos de machaqueo.